Antes de abandonar la casa por un largo tiempo es normal sentir algo de miedo. Al tomarse unas vacaciones uno se arriesga a dejar desprotegidos sus objetos de valor, que en muchos casos decidirá deja en su lugar en vez de buscar otro debidamente escondido.
Desde nuestras oficinas no le pedimos que sacrifique sus vacaciones sino que cuide mejor de sus propiedades adquiriendo, para ello, una caja fuerte.